Según la OCU, hay vehículos que pese a no contar con el distintivo de la DGT ECO o Cero emisiones contaminan menos que otros que sí disfrutan de la etiqueta. “El actual sistema de concesión de etiquetas es injusto”, afirma en este sentido la Organización de Consumidores y Usuarios asegurando que en la concesión de la etiqueta sólo se tiene en cuenta la tecnología que usan los automóviles y no el impacto real de las emisiones que producen. Tal y como recoge elperiodico.com.
“Los nuevos motores de gasolina de vehículos de pequeña potencia contaminan igual o menos que muchos coches híbridos no enchufables de alta potencia”, dice la OCU afirmando que incluso contaminan menos que los híbridos enchufables de gran cilindrada, cuando estos agotan su batería (pasados unos 40 kilómetros).
Para la Organización de Consumidores y Usuarios ocurre lo mismo con los modelos de gas licuado de petróleo (GLP) o gas natural comprimido (GNC). “Una vez en la carretera no existe forma de comprobar si están usando estos combustibles o están funcionando con gasolina y, por tanto, su impacto es el mismo, o más elevado, en función de la cilindrada”.
Según la misma fuente, aunque la OCU considere que el sistema de etiquetas ambientales supone un avance, “al impulsar la compra de automóviles con motores más limpios, como los eléctricos o los híbridos”, la organización cree que debe revisarse el sistema de concesión de etiquetas medioambientales para que puedan cumplir su objetivo, “que no es otro que clasificar a los vehículos de acuerdo con su impacto ambiental real”.