Los arañazos de cepillo de lavado son arañazos finos y alargados que a menudo aparecen en líneas paralelas y que son especialmente visibles en colores oscuros. La superficie tiene menos brillo y presenta un tono grisáceo.
Las causas
- Cepillos de lavado manual o de túneles de lavado que son demasiado gruesos o están sucios.
- Prelavado insuficiente con una cantidad de agua insuficiente.
- Lavar demasiado pronto una superficie recién repintada. La pintura recién aplicada es menos resistente a los arañazos si no se seca durante el tiempo suficiente o cuando se aplican demasiadas manos o se usa una cantidad incorrecta de endurecedor.
- Utilizar cepillos de lavado apropiados.
- Limpiar concienzudamente el vehículo con abundante agua.
- Evitar lavar el vehículo demasiado pronto después de que se le haya aplicado un acabado (véase la sección “Cuidados de la pintura”). Respetar las recomendaciones de espesores de película, tiempos de secado y cantidades de endurecedor.
Cómo repararlos
Desde Glasurit recomiendan pulir la superficie con Glasurit 562-1602 Compuesto de pulido fino y dar el acabado con cualquier pulimento estándar de alto brillo. Prevenir los daños causados por los cepillos de lavado no es fácil. Algunos vehículos salen de fábrica con laca original resistente a los arañazos. En estos casos, Glasurit recomienda reparar estos acabados con Glasurit 923-447 Laca HS VOC resistente a los arañazos. También indican que Glasurit 923-447 VOC es apropiada para su uso con otros modelos de vehículo.