Una de las claves para aumentar la productividad y rentabilidad en el taller es organizar la zona de trabajo. Así lo señala El Blog del Taller Eficiente, de la plataforma de Groupauto Unión Ibérica (GAUIb), ARMIN, que ha lanzado las claves para conseguir un espacio ordenado y limpio para “trabajar de manera eficiente”.
Para la plataforma debe tenerse en cuenta el espacio físico, la organización de los empleados y el flujo de los procesos de trabajo si se quiere lograr que el taller esté organizado. Y en este sentido señalan estos elementos como básicos para conseguirlo:
Delimitar la zona de trabajo
Consiste en dividir el taller en secciones, asignando a cada una de ellas funciones específicas. Desde El Blog del Taller Eficiente aseguran que esto, además de ser una estrategia organizativa eficaz, evita las “pérdidas de tiempo innecesarias” al tener más a mano las herramientas y maquinaria que se necesiten para los trabajos.
Orden
Si además de tener delimitada la zona de trabajo, tal y como se ha señalado en el punto anterior, se organizan las herramientas y utensilios en armarios, carros, etc. “optimizaremos mejor los recursos, dispondremos de más espacio y despejaremos la mente, ya que no gastaremos energía en recordar dónde están los materiales, sino sólo en solucionar las averías o hacer los mantenimientos”, aseguran desde la plataforma.
Tecnología
Una manera de mejorar la organización y potenciar los resultados en el taller es recurrir a las nuevas tecnologías. Permiten, por ejemplo, programar citas o asignar tareas, lo que se traduce en mayor optimización del trabajo, así como reducir costes, aumentar la productividad y mejorar la imagen del taller, al permitir reparaciones más eficaces y eficientes o diagnósticos más precisos. Por eso desde el blog lanzan dos preguntas que un taller debe hacerse: ¿Está el negocio equipado con la tecnología más moderna? ¿En qué medida la aprovechan los empleados?
Limpieza
La acumulación de suciedad empeora el entorno y puede incluso llegar a afectar a la salubridad del espacio de trabajo. Por eso, desde la plataforma resaltan la importancia de gestionar los residuos: usar contenedores para acumular los que tienen un tratamiento más complejo, o dedicar un espacio concreto al uso de determinados productos, como los neumáticos, aceites, baterías, lubricantes o pinturas. Asimismo, desde la plataforma recuerdan que no solo basta con organizar la acumulación de los residuos, sino que también conviene organizar la retirada.
Problemas de espacio
En este sentido se plantean dos situaciones: que el taller esté lleno de coches y que haya algunos abandonados.
El Blog del Taller Eficiente advierte que aunque el taller tenga mucho trabajo, si está ordenado puede verse tentado a aceptar más trabajo todavía. No obstante, debe tener en cuenta que en este caso se está comprometiendo a unos plazos de entrega que debe cumplir.
De lo contrario, señala que si el taller está a rebosar, puede reflejar “desorganización y mala planificación, y por tanto generar desconfianza en el cliente”.
En segundo lugar, los coches abandonados por los clientes en el taller también son un problema. Desde el blog señalan que debe verse como un coste porque cuesta espacio, tiempo y dinero: “A medida que el espacio es cada vez más valioso, tener un automóvil de más en las instalaciones aumenta tus pérdidas, de manera que si tu precio de mano de obra es de, por ejemplo, 60€/hora y el coche aparcado te quita diez minutos de tu tiempo al día -porque ocupa un espacio que limita la movilidad y te obliga a lo que obliga a moverlo, a dar rodeos. etc.-, eso significa que, al año, te cuesta unos 2.500€”, destacan.
Así, desde la plataforma recomiendan que, contando con que la ley deja poco margen de maniobra al taller y que la única solución viable -para quedárselo en propiedad deben pasar seis años- es la de enviarlo al desguace, salvo que la autoridad decida adjudicarlo a servicios de vigilancia y control del tráfico, lo mejor es cumplir los plazos mínimos, ahora que la administración ha permitido acelerar este trámite.