El valor de las ventas de los talleres roza los niveles prepandemia . Sin embargo, la inflación sigue amenazando la rentabilidad del sector, comienza a obligar a los talleres a subir su precio de mano de obra y es su principal preocupación de cara al segundo semestre del año. Así lo indican estimaciones de Conepa.
El número de ventas que alcanzaron los talleres durante el primer semestre del año aumentó un 7%, por lo que, prácticamente, iguala los niveles prepandemia. Desde enero hasta julio del año 2019 el sector vendió por valor de 6.350 millones de euros y en 2022 el valor se sitúa en los 6.330 millones de euros, una cifra un 0,5% inferior que hace tres años.
Sin embargo, la inflación también está influyendo en los resultados absolutos del sector. Las entradas de vehículos a los talleres han crecido un 5% en lo que va de año y la factura media del taller un 2,5% por ciento, debido fundamentalmente al aumento de precios de los recambios, neumáticos y materiales de pintura.
Por su parte, la mano de obra ha crecido ligeramente. Esto es algo que, unido al aumento de costes, repercute negativamente en la rentabilidad de los talleres, pues ya desciende por encima del 20%. Hasta ahora solo uno de cada cuatro talleres había subido su precio/hora de mano de obra, pero la situación está obligando a que esta sea una decisión que tomen cada vez más negocios. De hecho, dos de cada tres empresas del sector prevén hacerlo en los próximos tres meses.
Víctor Rivera, secretario general de Conepa ha señalado que “los talleres trabajan más y facturan más, pero ganan menos, lo que representa una amenaza en momentos en los que son necesarias inversiones constantes en equipamiento y formación”.
Las preocupaciones de los talleres
Una encuesta realizada por Conepa sobre las inquietudes de los talleres indica que la mayor preocupación del sector es la subida de los precios en general y de los combustibles en particular, por la consecuente pérdida de poder adquisitivo de los clientes. Los talleres temen que ello se traduzca en una reducción drástica del kilometraje medio, y por tanto en menos operaciones y menos rentabilidad.
La segunda preocupación del sector es la falta de profesionales. Sin embargo, en lo que se refiere al empleo, tal y como indica Conepa, la evolución denota continuidad. En España unas 151 mil personas trabajan en el sector de la reparación y mantenimiento de vehículos. Tras una leve bajada en 2020 por efecto de la pandemia, el nivel de empleo anterior a la misma se recuperó a finales de 2021 y permanece estable.
La presión normativa, que se traduce en un aumento de las obligaciones legales de los talleres y del número de inspecciones ocupa el tercer puesto.
Estado de la demanda, por especialidades
Tanto la demanda de la electromecánica como de la carrocería (chapa y pintura) evolucionan de manera similar.
En el caso de la primera han crecido las operaciones de reparación frente a las de mantenimiento preventivo, al contrario de lo que ocurrió en 2021. Mientras, en la carrocería la demanda crece por el aumento de movilidad.