El anuncio de la propuesta de Ley de Cambio Climático y Transición Energética está trayendo cola. En esta ocasión, ha sido la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, quien ha declarado que las plantas españolas de producción de vehículos están “muy rezagadas” en fabricación de vehículos eléctricos, con apenas cuatro modelos, según recoge Europa Press.
Asimismo, se va a poner en marcha, por parte del Ejecutivo, un conjunto de medidas para el impulso de la fabricación de automóviles eléctricos en las factorías nacionales, según ha defendido Maroto en la sesión de control al Gobierno en el Senado. Así como dar “certidumbre” y “seguridad jurídica” al sector del automóvil mediante un grupo de trabajo que velará por la competitividad y la sostenibilidad de la industria de automoción.
A la poca infraestructura eléctrica se le añade que las plantas españolas estás “muy rezagadas” con respecto a la producción de eléctricos, entonces, ¿cómo se va a impulsar esta clase de vehículos? Según Maroto, el Gobierno apoyará a los consumidores para que puedan cambiar su automóvil actual por otro más sostenible con el medio ambiente y fomentará la instalación de puntos de recarga.
El senador popular Luis González le preguntó a la ministra de Industria si el Gobierno piensa que va a potenciar la industria automovilística mediante la prohibición de los vehículos diésel, gasolina e híbridos, a la que Maroto respondió defendiendo que la mencionada medida deberá ser debatida y consensuada.
Dentro de la propuesta de Ley de Cambio Climático, el equipo de Pedro Sánchez plantea un sistema eléctrico 100% renovable en 2050, plazo hasta el que se desarrollarán las actuaciones que se determinarán en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima y en la Estrategia de Bajas Emisiones que incluye el fin de todos los permisos de hidrocarburos, la prohibición del fracking – técnica para posibilitar o aumentar la extracción de gas y petróleo del subsuelo- más allá de 2040, el fin de los subsidios económicos a energías fósiles y la prohibición de matricular vehículos que emiten CO2, incluyendo los híbridos, después de esa fecha, según recoge Europa Press.
Sin embargo, en opinión de González, “la compra de vehículos va a descender, provocando la bajada de producción de las fábricas y arrastrando a la industria auxiliar. Bajará el PIB y la riqueza de los españoles y afectará muy seriamente al empleo”, por lo que en vez de provocar que los consumidores cambien su automóvil, el efecto será el contrario.
Un acuerdo para adaptarse a una movilidad sostenible y eficiente
Por otro lado, el mes pasado se constituyó el ‘Acuerdo Estratégico para una movilidad sostenible y eficiente y la adaptación de la industria automovilística española a los nuevos retos’, un proyecto que estará coordinado por un Consejo Estratégico de la Automoción. Este organismo, según informa la agencia de noticias, estará compuesto por los ministerios de Industria, Comercio y Turismo, y Transición Ecológica, las asociaciones de fabricantes (Anfac), concesionarios (Faconauto), vendedores (Ganvam), proveedores (Sernauto) e importadores (Aniacam), y los sindicatos de UGT y CC.OO.