La incesante escalada de los precios de los combustibles está poniendo sobre las cuerdas a infinidad de empresas relacionadas con el transporte y el auxilio en carretera. Si a mediados de marzo era la Plataforma en Defensa del Sector del Transporte (integrada por autónomos y pequeñas empresas) la que decidía iniciar un periodo de huelga para exigir al Ejecutivo medidas que garanticen la viabilidad de sus negocios, ahora son las compañías auxilio en carretera las que han convocado cuatro jornadas de paros.
Y no serán cuatro días menores, ya que coincidirán en plena Operación Salida de agosto (del 29 de julio al 1 de agosto). Según la plataforma convocante, la Asociación Nacional de Empresas de Auxilio en Carretera (ANEAC), asociación mayoritaria del sector de auxilio en carretera, estos paros responden a las “circunstancias que nos han impactado negativamente a la hora de desarrollar nuestra labor profesional”. ¿Cuáles? “El alza del precio del combustible, la progresiva desaparición de empresas y empleados, trabajar por debajo de costes, la problemática de las reparaciones in situ, las mayores exigencias por parte de las compañías, etc.”.
En una carta remitida por su Junta Directiva, la patronal asegura haber agotado todos los cauces después de que no hayan prosperado las negociaciones llevadas a cabo “a lo largo de los últimos meses” con compañías de seguros y plataformas de asistencia. “Desgraciadamente, a pesar de exponerles claramente la situación en la que nos encontramos, ha sido imposible llegar a un acuerdo o, siquiera, alcanzar un compromiso por su parte para avanzar en una mejora de la coyuntura actual”, lamentan.
Paros y marcha lenta
Ante la imposibilidad de llegar a un acuerdo, ANEAC ha acordado “tomar medidas y dar una respuesta pública” para poner de manifiesto “la situación a la que nos enfrentamos diariamente”. Una situación marcada, según la patronal, por “los precios actuales de los carburantes y las exigencias de las plataformas y las compañías aseguradoras, que hacen prácticamente inviable el futuro de nuestras empresas”.
Así, la Junta Directiva ha acordado un paro técnico del 29 de julio al 1 de agosto y, de manera paralela, llevar a cabo una marcha lenta reivindicativa por las carreteras de la Comunidad de Madrid.