A partir del 1 de enero de 2026 todos los coches deberán llevar una señal luminosa V16 con geolocalización y conexión con la plataforma DGT3.0.
Estos sistemas pasarán a sustituir a los triángulos de seguridad que usamos para señalizar un accidente o avería. Estarán destinados a la visibilidad del vehículo accidentado y a comunicar su ubicación a la Dirección General de Tráfico (DGT), “no pudiendo incorporar funcionalidades adicionales”, según se puede leer en el BOE. La señal V16 deberá ser geolocalizada a partir del primer día de 2026, aunque hasta entonces se podrá usar sin geolocalizar y serán obligatorios los triángulos.
Estos sistemas luminosos no permiten un seguimiento en modo real, por lo que Tráfico nunca podrá saber por dónde circulamos ni a qué velocidad. Asimismo, tal y como señala el Real Decreto, esta geolocalización “constituye una medida extremadamente novedosa, sin precedentes en materia de seguridad vial en otros países”.
La señal luminosa V16 es una baliza de color amarillo, visible en 360 grados, que debe ser capaz de resistir temperaturas entre 10 grados bajo cero y 50 grados, con una alimentación autónoma que garantice su uso durante 18 meses, o mediante batería recargable. Su forma de funcionar es sencilla, pues lo hace automáticamente al pegarlo al vehículo con su soporte magnético.
El motivo por el que se ha decidido sustituir los triángulos de seguridad por estos dispositivos luminosos es reducir los atropellos que se producen cuando los usuarios están en los alrededores del vehículo siniestrado o averiado. Una cifra que ha ascendido hasta los 40 casos en los últimos tres años.
Ventajas del dispositivo V16
Por ejemplo, no hace falta salir del vehículo a colocar la luz de emergencia, es visible a 1 km de distancia y además la DGT recoge las coordenadas del vehículo averiado o accidentado para después compartirlo con navegadores, aplicaciones, paneles informativos y vehículos conectados. Además, permite una mayor visibilidad ante situaciones de baja visibilidad, por ejemplo de noche, con niebla o lluvia muy abundante.