Las patronales de talleres Cetraa, Conepa, Ganvam y Fagenauto han vuelto a responder a Mapfre después de que la compañía de seguros defendiera su baremo Digital Paint ante el rechazo de los talleres por “afectar a su rentabilidad“.
Pues bien, ahora en un nuevo comunicado enviado por las asociaciones, estas han desmontado de nuevo uno a uno todos los argumentos que dio Mapfre para defender su baremo ante las diferentes acusaciones que apuntaron las asociaciones en un intento de, según han señalado las patronales, “no afrontar los déficits” de su propia herramienta.
En respuesta a la denuncia de Digital Paint por parte de los talleres, Mapfre defendió su baremo señalando que es “transparente” porque que se presentó a las asociaciones, talleres y peritos explicándoles los criterios de la nueva herramienta y en qué consistiría, así como se resolvieron las dudas que pudieron surgir respecto. Las patronales niegan todo esto y señalan otra versión diferente de los hechos.
Afirman que, en realidad, la compañía solo organizó una “mera reunión informativa” del baremo “sin entrar en profundidades en espera de su formalización definitiva”, que Mapfre “no contestó a las cuestiones y dudas técnicas” que se plantearon y que “ahora plantea la reunión técnica sobre Digital Paint que lleva aplazando desde marzo”.
Por otro lado, las patronales señalan que el concepto de transparencia que Mapfre tiene de su baremo debería ir más allá de haberlo presentado a talleres, asociaciones y peritos, ya que no ha informado de cómo se han calculado los tiempos o materiales de pintura asignados a cada reparación y en su aplicación diaria no detalla ni intervenciones ni precios, “lo que lesiona derechos de talleres y consumidores”.
“Mapfre lo reconoce”…
Por otro lado, las patronales denunciaron en su día los precios de Digital Paint en comparación a los que ofrecía Cesvimap en 2020, que un -59% más bajos en mano de obra y un -46,5% más bajos en materiales de pintura. Unos datos que representan una reducción del -2,79% y del -17,65% en promedio, respectivamente, de las 140 operaciones examinadas en un estudio realizado por las asociaciones.
Asimismo, las patronales denuncian que con la hipotética actualización de precios de Cesvimap en 2021 y 2022, la disminución de Digital Paint rondaría ahora el -30%, lo que sigue afectando significativamente a la rentabilidad de los talleres.
Para defenderse de estos datos, Mapfre se limitó a dudar de la veracidad de los datos por “desconocer el modo” en que se realizó la comparativa entre ambos baremos de la aseguradora y porque “no se le invitó a participar”. Unas palabras que resultan “paradójicas” para las asociaciones, más teniendo en cuenta que en su momento Mapfre “ni invitó ni dio a conocer a las asociaciones los criterios seguidos en la elaboración de Digital Paint”.
Asimismo, celebran que la aseguradora respondiera a la comparativa del estudio entre Cesvimap y Digital Paint y el promedio de reducciones entre ambos baremos, alegando que “los resultados pueden ser diferentes en función de cuáles sean las condiciones de la comparativa”, ya que lo consideran una manera de darles la razón: “De modo implícito, Mapfre reconoce que las diferencias que señalamos son posibles, porque de estas declaraciones puede deducirse que el baremo, dependiendo de cómo se utilice, puede dar un resultado u otro, prueba palmaria de su falta de objetividad”.
Finalmente, las patronales han aconsejado a Mapfre no dudar de la fiabilidad del estudio, porque así podría “confundir y distraer la atención sobre el verdadero problema: la publicación de un baremo que reduce la rentabilidad del taller al alejar sus valoraciones del coste real de las reparaciones”. Además han pedido a la compañía que “ataje los elementos críticos de Digital Paint, que más allá de a los talleres también afectan a los consumidores”.