Liqui Moly apuesta fuerte por nuestro mercado, avanzando con la creación de un almacén en Madrid que, según estiman, estará operativo en junio de este mismo año. Esa era la novedad más importante con la que acudían a la feria española de la posventa.
El fabricante de lubricante y aditivos abrirá una nueva sucursal y un nuevo centro logístico en España con el objetivo de fortalecer el negocio, después de haber experimentado el mejor trimestre de la historia de la compañía. Los primeros tres meses del año confirman el crecimiento del negocio en España y Portugal, un camino que no están dispuestos a dejar de andar, toda vez que sus clientes en España no dejan de crecer con los productos de su marca.
Desde este nuevo almacén el fabricante alemán suministrará productos al mercado español, “mejorando el servicio y la rapidez de las entregas en toda la península e islas”, anuncia Matthias Bleicher. Hasta ahora, los clientes españoles recibían servicio desde la central ibérica, ubicada cerca de Lisboa. Un paso sin duda adelante que simboliza de algún modo la apuesta de Liqui Moly por nuestro país.