Motul en colaboración con el Mundial de Superbikes (WSBK), ha desarrollado un nuevo aceite de competición: el 300V² 4T 0W-30 SBK. Este nuevo aceite con tecnología ESTER Core®, no sólo aporta un rendimiento extra validado por los más destacados equipos de fábrica, sino que además presenta una reducción de la huella de carbono del 25% durante todo su proceso de fabricación.
En su fórmula, Motul ha hecho una selección de ésteres sobre aceites base orgánicos y sintéticos de alto rendimiento, y los ha combinado con un paquete de aditivos que ofrecen un alto poder detergente y control de la formación de depósitos. Es así como el nuevo 300V² 4T 0W-30 SBK, consigue aumentar el rendimiento del motor mientras lo protege.
La tecnología ESTER Core® del aceite, garantiza la máxima potencia de salida del motor y velocidad punta exigidos en competición, sin comprometer la fiabilidad y la protección contra el desgaste en condiciones extremas de pilotaje.
Motul impacta no sólo con los resultados de su nuevo aceite sobre las pistas, sino también con el bajo impacto de éste en el ambiente. Su formulación a partir de bases renovables de alto nivel y menos materiales fósiles puros, presenta una reducción de la huella de carbono del 25% durante todo su proceso de fabricación.
La compañía francesa ha sido pionera en el desarrollo de lubricantes y productos enfocados al deporte de motor y cada día trabaja por alcanzar hitos que permiten llevar el pilotaje un paso más allá. En palabras de Dieter Michels, experto técnico en Motul: «La dedicación de Motul es aportar mejores prestaciones y fiabilidad a los pilotos y gracias al aceite de motor 300V² WSBK 0W-30, las prestaciones de las motos deportivas pueden subir hasta un 2,5%, ¡aportando la emoción de la carrera a cualquier propietario de una moto deportiva!».