Remedios Pena fue la tercera perjudicada en un siniestro. Tal y como relata en el vídeo, tras ceder el paso antes de entrar a una rotonda, un 4×4 le impacta en la parte trasera del coche. Después de cubrir el parte del accidente con el conductor del otro coche y de hablar con él sobre el envío del parte del accidente a sus respectivas compañías, comienzan los problemas. Para sorpresa de Remedios Pena, su compañía le niega haber recibido el parte del otro coche implicado en el siniestro. Esto, afirma Remedios Pena, ya empezaba a resultarle raro…
Pago de franquicia
“Si quieres arreglar tu coche, debes pagar la franquicia”, le dijo a Remedios su propia compañía, a pesar de ser algo que no puede hacerse: “La compañía no puede imponer al asegurado esas condiciones que ha firmado en póliza porque quien tiene que hacer la indemnización es la compañía del culpable”, explicaba Irene Lois, abogada de Siauto.
Derivación a taller
La segunda traba llegaba en el momento en que Remedios Pena le pedía al seguro que le enviara una grúa para que recogiera el coche y lo llevara al taller. “Pero, ¿a qué taller lo vas a llevar?”, le preguntó su compañía, a lo que Remedios le respondió: “a uno”. En aquel momento ella ya percibía que su compañía le estaba poniendo problemas para llevar su coche al taller que ella quisiera escoger. Así lo percibió Fran Vales, gerente de TallerD3 y socio de Siauto que ayudó a Remedios a gestionar la situación con la aseguradora.
Y es que, las compañías de seguro no pueden negar a sus asegurados el derecho a elegir libremente a qué taller quieren llevar su coche a reparar. “Diga lo que diga la compañía, si eres tercero perjudicado, puedes llevar el vehículo al taller de tu elección”, afirma Lois.
Pero tampoco pueden negarle a su cliente su derecho a adquirir un vehículo de sustitución, aunque esto no se acuerde expresamente en la póliza del seguro. Si el asegurado perjudicado alquila un vehículo durante el periodo de tiempo que su coche está en el taller, la aseguradora del culpable del siniestro está obligada a abonarle ese vehículo de sustitución “aunque en su póliza no tuviera derecho a un vehículo de sustitución”, explica la abogada de Siauto.
Vehículo de sustitución
Remedios continúa relatando su experiencia y plantea la tercera traba. Su seguro le llama: “Me dijeron que el coche estaba siniestro y que lo valoraban en novecientos euros”.
Respecto a esto, Fran Vales cree que la valoración económica de la compañía no tiene por qué ser la definitiva y que lo que debe ocurrir es que la parte perjudicada del accidente salga compensada por los daños que se le han causado: “Tu compañía puede decir lo que quiera, pero aquí hay un causante de un daño. Alguna aseguradora de las partes implicadas debe compensarlo y cubrir el coste de la reparación, siempre y cuando ese valor no supere el valor de mercado. Había que resarcir el daño que le había causado a Remedios la parte contraria. Tú como compañía puedes hacer una valoración, pero nosotros no tenemos por qué estar de acuerdo”, apunta Fran Vales.
“Menos mal”
Y lo pusieron en práctica. Siauto se puso en contacto con un perito independiente para que valorara el vehículo de Remedios, viera el valor de reparación y el valor de mercado. Una vez hechos los cálculos, desde Siauto confirmaron que, efectivamente, el coche de Remedios no era un siniestro total, tal y como lo había comentado la compañía.
Finalmente llegaron a un acuerdo con Plus Ultra, compañía de Catalana Occidente, que pasó de ofrecerle a Remedios novecientos euros -menos los restos del coche-, a pagar 4.400 euros de factura con IVA incluido. Reale Seguros, la parte contraria, indemnizó con 1.600 euros a la empresa que le alquiló el coche durante un mes.
Hoy Remedios respira liberada y agradecida: “Menos mal. Si me guío por lo que dice mi seguro, a fecha de hoy no tendría coche”.
La reunión
Tal y como se desprende de la noticia, Siauto ofrece una nueva perspectiva para afrontar el conflicto entre talleres y aseguradoras.
En Madrid, el próximo 23 de abril (coincidiendo con Motortec), organizarán una reunión para explicar su propuesta. Si tienes un taller de carrocería no deberías perdértelo…
Esta señora ha tenido la suerte de contar con la ayuda de Fran, el gerente de D3, que ya está bastante curtido en sus “relaciones” con las aseguradoras y fue capaz de orientarle. Pero en general, y no sólo en el ámbito de las relaciones con talleres de reparación o aseguradoras, si no en la gestión de la economía personal o empresarial, en la educación no somos preparados para conocer nuestros derechos y la legalidad vigente,ni se nos enseña como ejercerlos y hacerlos respetar, priorizando otras enseñanzas en la escuela muy respetables, pero menos útiles para nuestra vida como ciudadanos y consumidores.-
Tenemos que conocer nuestros derechos y hacerlos RESPETAR.
(Simplemente)