Un sevillano lleva catorce años esperando a que su taller le entregue el coche

José tuvo un pequeño accidente con su coche en 2003. Para arreglarlo, estuvo comparando en diferentes talleres de la zona. Hermanos Capdevila resultó ser el más económico. Con una factura de 2.405,72 euros, se acercó hasta su banco para que le concedieran el préstamo que necesitaba ya que tenía que abonar 2.000 antes de comenzar con los trabajos.

Le dijeron que tardaría 25 días, pero nada que ver. “Cada vez que iba me contaban que tenían problemas familiares y que no habían podido empezar el arreglo de mi coche”, explica Cortés. Los días se fueron convirtiendo poco a poco en semanas, meses y años. La reparación no requería de tanto tiempo, pero él seguía confiando en la profesionalidad de aquel taller.

Ocho meses tardó en darse cuenta de que debía comprarse un coche nuevo. Las esperanzas comenzaron a mermar… Aquello le empezó a oler raro. Sin embargo, tanta era su fe que afirma no haber desconfiado hasta pasados cinco años.

En 2008 puso ante la Guardia Civil una denuncia relatando lo sucedido: “”Durante todo ese tiempo nunca puse en duda el buen hacer de ellos, pero cuando pasaron cinco años fui consciente de que ya no me lo devolverían”, señala.

Según informan en el diario El Mundo, desde el taller han alegado que, en el momento del suceso, el negocio era gestionado por una sociedad formada por dos hermanos. Uno de ellos se largó y empezó a hacer el trabajo por su cuenta. Así, sigue sin saberse qué sucedió con el coche ni con el dinero que su cliente entregó hace ya catorce años.

Los hermanos no quieren saber nada del asunto, en el taller (cambiado ya de titularidad) poco pueden hacer, pero él no se resigna: el próximo martes presentará una nueva denuncia para que le entreguen su Ford Sierra, tras más de 14 años reclamándolo.