No todas las partes de un faro pueden repararse. Es lo que ha tratado de explicar Gaspar Pedreño, el Tallerista Rebelde y gerente de Tallerbox, en Murcia, en este vídeo. Sin embargo, estas reparaciones sí que se están haciendo en algunos casos, pero ¿quién? Y ¿cómo, sin tener ningún conocimiento técnico, el usuario puede detectar si le ha pasado? Muy atentos a este vídeo:
Pedreño especifica que las patas de los faros sí pueden repararse, así como también se puede pulir la lente. Sin embargo, sustituir elementos del interior, la carcasa o la lente del faro es ilegal por dos motivos. Por un lado, ni el fabricante del vehículo ni el del faro contemplan su sustitución, y por otro, el Real Decreto que regula la prestación de servicios del taller dice que los reparadores están “obligados a instalar recambios nuevos en los vehículos, salvo algunas excepciones”, que el Tallerista Rebelde apunta que “no se dan nunca”.
A pesar de la norma, estas reparaciones se hacen… ¿quién? Según Pedreño esta es una tendencia cada vez más extendida entre las aseguradoras y sus concertados. Pero recalca que es una práctica que depende sobre todo del criterio del perito, que por ceder ante las presiones de las aseguradoras o por desconocimiento de la normativa, mandan a reparar estos faros a los talleres: “El perito debe hacerse valer y poner sobre la mesa su criterio técnico ante las aseguradoras” porque esas reparaciones no se pueden hacer, recalca el gerente del taller murciano.
Además, ¿cómo puede el usuario darse cuenta de si le han reparado o sustituido el faro? Es muy sencillo y no hay escapatoria. Mira el vídeo…