En primer lugar, para comprobar si las sondas de conmutación de circonia presentan alguna avería, el instrumento más efectivo es el osciloscopio. Muestra el voltaje mínimo y el máximo, el tiempo de respuesta y la frecuencia. Al hacer esta comprobación, deben respetarse las especificaciones del fabricante.
Procedimiento:
Poner el motor a temperatura operativa, a 2.000 r.p.m.
- Conectar el osciloscopio a una línea de transmisión, sin desconectar la sonda de la unidad de control de motor.
- Configurar la gama de medición en 1 – 5 voltios y el tiempo en 5 – 10 segundos, teniendo en cuenta las especificaciones del fabricante.
- Si procede, activar el reconocimiento de señal automático.
Una sonda que funcione correctamente oscila entre los 0,1 y los 0,9 voltios, con una frecuencia de 0,5 – 4 Hz.
Consejos para el diagnóstico
Por lo general, una comprobación visual nos da las primeras pistas de una posible avería. Los puntos a comprobar en el taller son:
Valor de la resistencia del elemento calentador:
Si está por encima de 30 Ω es que la sonda es defectuosa.
Cables:
¿Están rotos los cables o el conector?
¿Está intacta la junta del cable?
¿Ha penetrado humedad en el conector?
¿Los contactos del conector están en buen estado?
¿Está demasiado apretado el cable?
Cuerpo de la sonda:
¿Hay daños visibles en la sonda?
Cada tipo de vehículo tiene una clase de sonda especialmente diseñada, por lo que es esencial que sólo se repongan con sondas de las mismas características.
Es muy importante utilizar los catálogos NTK actuales para encontrar la sonda de recambio correcta para cada aplicación.